El vacío invierno de la ciudad insomne
acuchilla a los transeúntes.
Siento deslizarse a los dragones que anidan en mi garganta.
Escapan por la madrugada
danzan y me acunan.
Es perfecta la compañía: Goya, las escaleras del Teatro Municipal, el ruido, la callejuela a la izquierda, tu mano reconociendo la mía.
Tu voz otoñal huele a vieja amistad
y sí, son lindos los besos en el centro de la ciudad,
pero tengo dragones en la garganta
y no les gusta que te acerques tanto.
acuchilla a los transeúntes.
Siento deslizarse a los dragones que anidan en mi garganta.
Escapan por la madrugada
danzan y me acunan.
Es perfecta la compañía: Goya, las escaleras del Teatro Municipal, el ruido, la callejuela a la izquierda, tu mano reconociendo la mía.
Tu voz otoñal huele a vieja amistad
y sí, son lindos los besos en el centro de la ciudad,
pero tengo dragones en la garganta
y no les gusta que te acerques tanto.
9 comentarios:
Vaya!... (en español)
He quedado sin palabras. Un final perfecto.
:)
Si. Es lindo besarse en el centro de la ciudad. En el centro.
los besos son geniales en los centros de todas las ciudades; en calles pequeñas, en cafés llenos de luz...
besarse, siempre
es
un abrazo.
Metimos el freno de mano, no?
Escuche q venias por aqui pronto. Cierto?
Más lindo que besarse en el centro de la ciudad (que es lindo) es besarse en el centro de la vida y del alma. Y llegando ahí, no hay frenos, ni excusas, ni salvavidas, ni relojes...solo beijos.
Desde hace mucho tiempo, los dragones han protegido a las beldades de individuos estereotipados. A veces, sin embargo, su custodia se transforma en suspicacia bélica, impidiéndose así el inefable acto de besarse sin restricciones convencionales.
Un abrazo ácrono.
6 de julio es la fecha... llama cuando llegues.
Pao:
Gracias... Lo bueno es que he descubierto, algunso días después, que no fue un final.
:)
Un abrazo grande
Pablo:
En el centro. Como dice La vero vero, en el centro de todo.
Ven siempre. (Claro que tampoco está nada mal besarse en las periferías, no? )
Saludos
Flacazul:
Cuánta razón tienes...
Cuánta...
Ronaldo:
Es un mal vicio ese de dejar la mano siempre sobre el freno, por si las dudas. Nos vuelve paranoicos, creo.
Seis. Anotado.
Hasta pronto...
Vero Vero:
Qué bueno tenerte por aquí. Me gusta mucho el color de tu libertad.
Un abrazo grande, y salud.
Enrique:
Lo que los cuentos no contaban es que el dragón es la mujer a quien protege.
El abrazo vuelve, simultaneo.
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